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Publicado en http://fueradelexpediente.blogspot.com, el blog personal del periodista Guillermo Berto.

¿Vamos a ver cómo se eligen los fiscales?

Algunas razones por las cuales una/un ciudadana/ciudadano común debe interiorizarse de la elección de fiscal de Cámara que hará el Consejo de la Magistratura.

* Si usted o algún familiar fue víctima de un delito y no tiene para pagarse un abogado particular, el fiscal es quien la representa (en rigor representa algo más difuso: el interés de la Estado por perseguir al autor de un delito. Pero usted tiene derecho a exigirle cosas, en su condición de víctima o familiar de una víctima).

* El fiscal de primera instancia, con el cual usted probablemente tomará contacto si es víctima de un delito, consulta casi todo lo que hace con el fiscal de Cámara. En algunos casos esa consulta es informal y en otros es formal, y puede definir si la causa que a usted le interesa continúa bajo investigación o se archiva.

* El fiscal de Cámara es el encargado de sostener la acusación contra el imputado en un juicio oral. Si no lo acusa, el imputado quedará libre sin que el Tribunal de juicio –y mucho menos usted- puedan impedirlo. (En algunos casos es lo que corresponde, por falta de pruebas entre otros posibles motivos).

* El fiscal de Cámara puede hacer un acuerdo con el defensor para que el juicio sea abreviado (sin testigos), puede aceptar que se aplique una probation (suspensión del juicio a cambio de que el imputado cumpla ciertas obligaciones), puede pedir que la condena sea efectiva o condicional.

* El fiscal de Cámara es el encargado de apelar la sentencia de un juicio oral cuando no está de acuerdo con el resultado. Por ejemplo, si pidió 11 años para el acusado y los jueces lo condenaron a 4 años y por otro delito, puede apelar.

* Si el fiscal de Cámara no apela –porque está de acuerdo o porque se olvida de apelar-, el caso queda cerrado para siempre. Nadie –y mucho menos usted- podrán reabrirlo.

* El fiscal de Cámara supervisa el trabajo de los fiscales de primera instancia, puede diseñar estrategias para perseguir el delito, armar equipos de trabajo, dar instrucciones a la policía.

Todo eso y más podrá hacer el fiscal de Cámara que elegirán.

Participe. La mayor parte del proceso de selección es pública.

Por ejemplo los exámenes orales, que se harán el 29 y 30 de julio a partir de las 8:30 en la sede del Consejo, Carlos H. Rodríguez 364. (En cuanto tenga la fecha de las entrevistas personales, también las publicaré. Para el lego, son mucho más interesantes que los exámenes).

Es un edificio de ingreso helado, el guardia de la entrada no desborda hospitalidad y pide, no sé a título de qué, nombre y número de documento a los visitantes.

Pero vale la pena ir. Tómelo a manera de inversión por su futuro y el de los suyos, como dicen las publicidades de productos menos importantes.

El Consejo de la Magistratura es un organismo que tiene una tarea de enorme importancia en comparación con los escasos controles públicos a los que es sometido. Los ojos de la ciudadanía pueden ser uno de los mejores.

La Justicia es un tema que nos interesa a todos. Lo demuestra cualquier encuesta que quieran consultar, y si no creen en las encuestas miren los medios de comunicación, y si no creen en los medios de comunicación conversen con familiares o amigos.

Observar los procesos de selección de sus integrantes es una especie de vacuna social. No garantiza que nos salvaremos de la gripe, pero reduce las chances.

(Ahora que lo pienso, el Consejo podría utilizar una partecita de su generoso presupuesto para hacer una campaña pública de difusión de su actividad y convocar a la ciudadanía a presenciar su actividad. Y no estoy pidiendo avisos, el blog es gratis).